Por: Juan Espinal
El mundo enfrenta una crisis que ha llevado a replantear la estrategia que se debe tener en política pública frente a la seguridad energética y la transición, que en todo caso no debe, ni puede, obedecer a caprichos ideológicos.
Tampoco se puede pensar el asunto con la agenda global de cambio climático que se tenía prevista en el 2018 y 2019; los efectos de la pandemia, la crisis económica a causa de la inflación, el ataque de Rusia sobre Ucrania, y el costo de los insumos, nos obligan a replantearnos. 365 bet
La seguridad energética, sin duda es la prioridad de los países de Europa, la dependencia que tenían de Rusia frente a los hidrocarburos, demostró la vulnerabilidad que se genera cuando un país depende de otro.
Alemania es el claro ejemplo, su modelo de transición energética era referente y aplaudido, la prohibición del fracking y el debilitamiento de las reservas, los llevó a depender de Rusia, y hoy están en crisis energética, al parecer tendrán que volver a quemar leña para sobrevivir; les salió más caro el remedio que la enfermedad. Otro ejemplo, es la decisión de la Ministra del Reino Unido de levantar la prohibición de fracking, con el objetivo de garantizar la estabilidad energética; insisto, en Colombia la transición energética debe ir de la mano de la seguridad energética.
Cuidado Colombia que en Europa con instrumentos jurídicos como el convenio de Aarhus, llevaron a satanizar la extracción de hidrocarburos, dejándolos en manos de Rusia que domina por tener el gas que necesita el viejo continente.
Uno de los primeros pronunciamientos de la Filósofa Ministra de Minas y Energía, Irene Vélez, fue informar a los colombianos que no firmaría más contratos de exploración de gas, y que en el momento en que se agotaran las reservas importaríamos este combustible de Venezuela. Afirmación que días después corrigió, mediante comunicado ante el pánico y la incertidumbre que generó. Sin embargo, el Embajador de Gustavo Petro ante la Dictadura de Maduro, Armando Benedetti, quien no tiene idea de asuntos minero-energéticos, afirmó: “hay que importar gas de Venezuela a Colombia” ¿Quién dice la verdad?
La verdad se conoció el pasado miércoles, la Ministra Irene, asistió a la Comisión V de la Cámara de Representantes a debate de control político con el objetivo de conocer su posición frente a la suscripción de nuevos contratos de exploración de gas en el país, informando que su cartera NO es “extractivista”, y que efectivamente no se firmarán más contratos de exploración de hidrocarburos en el país, informó además que respetarán los contratos ya firmados, los que serían suficientes para el proceso de una transición energética, “justa, gradual y segura”.
¿Cómo es posible que se nombre una Ministra de Minas y Energía que no sabe del tema y que rechaza la exploración y explotación de energías?
Esta decisión sin duda, será nefasta para el país, nos llevará a depender de la dictadura de Maduro. Mi pregunta es ¿Cómo van a importar el gas? موقع ويليام هيل La infraestructura está deteriorada, y cuánto le costará esto al país.
En el 2007 el Ex Presidente Álvaro Uribe Vélez, y el desaparecido dictador Hugo Chávez, inauguraron el gasoducto Antonio Ricaurte, el cual tiene una estructura de 225 kilómetros entre Punta Ballenas y la costa oriental del lago de Mariano en Venezuela, en Colombia el recorrido es de 88. لعب بوكر حقيقي 5 kilómetros, 39,44%, que costó 335 millones de dólares. Durante su funcionamiento en 2008 y hasta 2015, Colombia le exportó a Venezuela entre 0,5 y 0,7 trillones de terapies cúbicos de combustible; desde entonces esta infraestructura no se utiliza y el régimen nos adeuda desde el 2010 cuando nos pagó US 23 millones según noticia de Caracol, la suma de US 100 millones, será que Petro le pasa la factura de cobro a Maduro, esa platica nos serviría mucho ¿Dicen que recuperar el gaseoducto puede constar US 80 millones, qué país los pondrá ?
Lo cierto es que la intención de debilitar el sector Minero- Energético existe, tomemos nota, porque el costo económico de esta decisión será lamentable, 120 míl colombianos ingresarán al listado de desempleados. Colombia se convertirá en dependiente de Venezuela, estaremos arrodillados a la voluntad de Maduro, el gas se aumentará de 30 mil pesos a 150 mil pesos para los 37 millones de colombianos utilizan el gas , debilitarán el fondo de regalías, y los dividendos, el bulto de urea que utilizan 800 mil cafeteros, pasará de costar $220 mil a más de $500 mil. La Filósofa Ministra, nos llevará al abismo ¿Será que esa es la verdadera intención de su nombramiento?